Con la decisión de último minuto de Canadá de aceptar el acuerdo, junto a los EUA y México, para concluir satisfactoriamente las negociaciones sobre el TLCAN 2.0, el 30 de septiembre de 2018, surgió el llamado: Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés) el cuál, será firmado una vez que los congresos de los tres países lo aprueben.
Si bien, existe una diferencia entre el tratado que se pudo obtener y el óptimo, en el tema de la agricultura, los analistas de Forbes México, argumentaron que no se observan cambios significativos para la producción, importación y exportación de materias prima entre las tres naciones.
Lo anterior, con la excepción de algunos temas como los productos lácteos, en donde los productores de EUA obtuvieron un acceso del 3.5% del mercado doméstico canadiense, situación, por la que el gobierno de Canadá se prepara para ofrecer una compensación a los empresarios lecheros perjudicados por el acuerdo (según Reuters).
Por su parte, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) celebró que no se haya dañado lo que se había logrado en 25 años del TLCAN y que la propuesta de estacionalidad haya quedado fuera, asegurando las condiciones para que México mantenga el ritmo de crecimiento en exportaciones de frutas y hortalizas durante todas las temporadas.
El CNA mencionó que se eliminaron las posibilidades de la adopción de restricciones en el futuro, es decir, no se establecieron disposiciones en materia de investigaciones antidumping o anti-subsidios. Por otro lado, se acordó eliminar los subsidios a la exportación y la implantación de un foro para discutir si los apoyos domésticos generan alguna distorsión en el comercio, y con ello, tener la posibilidad de reducir esos impactos.
Se augura también, que México seguirá siendo especialista en el comercio de frutas y hortalizas, sobretodo, en exportaciones de productos como aguacates, espárragos, tomates, pepinos, chiles pimiento, mangos, frutos rojos y cítricos, hacia EUA y Canadá.
Por otro lado, EUA permanecerá exportando a México gran cantidad de cereales y oleaginosas, tales como el maíz, soya, trigo, arroz y sorgo, y algunas frutas, como manzanas, peras y uvas. Por su parte, Canadá seguirá siendo altamente competitivo en la venta de canola, trigo, alforfón, avena, manzanas y peras principalmente.
Asimismo, el CNA reconoció que el fortalecimiento del capítulo sobre Medidas Sanitarias y Fitosanitarias mejorará los procesos de certificación, regionalización y ayudará al reconocimiento de la equivalencia de estas medidas en los tres países.
Otro punto clave, es el establecimiento de un comité agrícola, mismo que se encargará de supervisar los compromisos adquiridos en el capítulo del campo en el USMCA. En esta parte, la Secretaría de Economía (SE) señaló que se acordó incluir una sección con estatutos para asegurar una mayor transparencia y generar mecanismos cooperativos, con énfasis en las actividades relacionadas con la biotecnología agrícola, lo que resulta en un punto clave para el debate sobre edición genómica.
Como resultado, se espera que el USMCA contribuya a una mayor integración económica y la creación de nuevas alianzas y redes de negocios para la producción, distribución y comercialización en América del Norte. Un acuerdo comercial de este nivel, es necesario para asegurar la estabilidad y la confianza de los inversores en cualquiera de los sectores económicos de los tres países.
Como señaló Forbes México, se retomarán proyectos que estaban detenidos desde hace 13 meses de negociaciones, con la generación de empleos y el acceso a mejores tasas de interés al consumo en el 2019.
Sin duda, había mucho que perder sin el acuerdo, y en términos relativos mantiene a México en la mira de inversiones altamente competitivas.
Fuentes:
http://cna.org.mx/
https://www.forbes.com.mx/
https://lta.reuters.com/